viernes, 24 de abril de 2015

LA PAELLA SEVILLA

Os presentamos una de las últimas novedades que podéis encontrar en YHoyquecomo, para pedir a domicilio.

La Paella Sevilla, situada en c/ Albuera, nº, 11 y c/ San Eloy, nº. 2, es un rincón único en el centro de Sevilla.

La Paella Sevilla, es un proyecto que viene de tradición familiar y origen valenciano, rescatando las recetas de siempre.





En el Restaurante La Paella Sevilla, se puede disfrutar de algunos de los mejores arroces que busca cocina tradicional y marinera y ahora también para pedir a domicilio.

Utilizan ingredientes de la más alta calidad para ofrecer distintas variedades de paellas.

Paella valenciana, paella de marisco, arroz negro, arroz abanda, ibérica y de verduras y fideuá.








¡ Y por supuesto uno de los ingredientes que no falta, como dice Marta su propietaria, es mucho cariño !

El producto y el respeto que le tienen los cocineros, hacen que cada plato sea un manjar.

La oferta gastronómica es muy competitiva, ofrece ración por persona por 5,95 € , también ofrecen paellas por encargo, pequeñas, medianas, grandes y fideuá. y a domicilio a través de YHoyquecomo.

Y como ellos dicen, una paella tradicional tiene un precio tradicional.







En La Paella Sevilla se elabora cocina tracicional sana, la calidad de la materia prima y el buen hacer de la experiencia en la cocina, hacen muy fácil que a la hora de querer comer un buen arroz, acudas a La Paella Sevilla

miércoles, 25 de febrero de 2015

EDAMAME SUSHI BAR

La cocina nipona, muy de moda últimamente, tiene más de 2000 años de tradición. Ofrece una
mezcla de sabores exóticos con diversos colores y un especial cuidado de la materia prima. Este
arte culinario es un fiel reflejo de la civilización más oriental.

Los socios Isaac Vidal y Santiago Moliní deciden montar un restaurante japonés, donde lo primordial es disfrutar de una comida sana y sabrosa, todo lo que encontramos en la carta es creación propia.  Este "Fast Good", de nombre Edamame, es un Sushi bar de comida para llevar que ha abierto recientemente sus puertas. Ubicado en calle Diego de la Barrera, junto al parque de María Luisa en  Sevilla, tiene servicio a domicilio con Y Hoy Que Como, además de un servicio de catering para eventos.

 El nombre de este lugar, ya nos llama la atención ¿qué significa?
"Edamame es el nombre de una preparación culinaria de las vainas de soja inmaduras, hervidas en agua con sal y servidas enteras" (Wikipedia).

Se trata de un establecimiento con toques urbanos especializado en makis, nigiris y sashimi. Todas estas delicias de Japón se pueden acompañar con una sopa miso caliente, una refrescante ensalada wakame, un poco de sake o, por qué no, un vino blanco de nuestra tierra.
Edamame utiliza productos de muy alta calidad con el único objetivo de agradar a sus clientes.

El restaurante Edamame invita a que te adentres en su cultura con un establecimiento acogedor, un personal atento y una mezcla de sabores originales con un toque tradicional. Los clientes destacan el Maki de atún, aguacate y cebolla roja, el Maki de salmón, persimon y wakame o el siempre presente California roll.

Edamame abre en horario continuo de Lunes a Domingos de 13 a 23 h.

Ya sabéis si quereis descubrir los sabores de la cocina japonesa, también podéis disfrutar en casa en un solo clik en www.yhoyquecomo.com





domingo, 22 de febrero de 2015

RESTAURANTE ABANDA



Desde su apertura en el 2011, el Restaurante Abanda se ha convertido en una de las cocinas referentes de nuestra capital.

El Restaurante Abanda es el tipo de restaurante que hace feliz al comensal que busca cocina tradicional, con algunas pinceladas de cocina creativa.

En el Restaurante Abanda se puede disfrutar de una amplia carta de arroces tanto secos como melosos, destacable el arroz seco con langosta y chipirones, o el arroz meloso con bogavantes.









El restaurante funciona con una oferta, que, según sus artífices, representa algunos de los grandes éxitos de El Restaurante Abanda. Uno de los entrantes estrella  ensalada templada de jamón, habitas y trigueros con virutas de parmesano, como el espectacular Involtinis de berenjena con soufflé de verduras y salsa de Pedro Ximénex.

 





También a domicilio  puedes pedir platos como ventresca de atún sobre pisto de tomate al gratín de ali-oli o alcachofas crujientes con jamón ibérico que por supuesto puedes pedir a domicilio en Y Hoy Que Como


viernes, 23 de enero de 2015

RESTAURANTE EL GATO CON BOTAS

El Gato con Botas abrió sus puertas hace un año, situado en la zona de la Buhaira. La cocina de Ignacio e Ystria se basa en los productos de proximidad, pero no prescinden de los productos foráneos que le permiten enaltecer sus platos, de hecho, una de las características de su cocina es la aportación de toques venezolanos.

Ofrece una carta muy variada, encontrarás platos principales como chipirones en salsa, croquetas caseras, revueltos de bacalao, puedes ver todos sus platos en www.yhoyquecomo.com




Destacable las AREPAS elaboradas al 100 % con ingredientes naturales, tienen una gran variedad, de queso de cabra y mermelada, de rúcula, salsa tártara y tomate. Arepa de Asado Negro, exquisita carne de cerdo asada, cocinada con miel de caña, receta venezolana.




La carta de El Gato con Botas cuenta con un apartado de cervezas artesanales internacionales, Albero, Legado de Yuste, una cerveza elaborada con cebada extremeña, Affligem con aroma alcohólico vinoso rico en matices frutales, una explosión de sensaciones para el gusto.


Disfruta de la mejor comida y las mejores cervezas artesanales con El Gato con Botas y a domicilio en www.yhoyquecomo.com

domingo, 11 de enero de 2015

PIZZA PAZZA EN SEVILLA






 Alessio y Massy llegaron a España hace trece años como estudiantes procedentes de La Toscana (Italia).

Actualmente regentan la pizzería Pizza Pazza situada en el emblemático barrio de El Plantinar en Sevilla.

Pizza Pazza no había servido pizza a domicilio pero con la llegada de Y hoy qué como  se consiguió lo que muchos clientes estaban deseando, poder disfrutar de una pizza de calidad sin salir de casa.

Alessio nos cuenta que el secreto de Pizza Pazza reside en que todos los ingredientes son naturales y todos los platos de elaboración casera.

La pizza preferida de los sevillanos es la Volponi (york, champiñones, cebolla y atún) también cuentan con la posibilidad de seleccionar pizzas con ingredientes a tu gusto, que tiene mucho éxito en las reuniones familiares y de amigos en casa.





Pizza Pazza abren en horario de Martes a Sábados de 13,30 - 15,30 h. y de 20,30 a 23,30 h.
Domingos de 20,30  a 23,30 h. con posibilidad de hacer pedidos online en Y hoy qué como

martes, 23 de diciembre de 2014

NUESTRO PEQUEÑO HOMENAJE

Este artículo de presentación pretende rendir homenaje a nuestra cocina de siempre, pero sobre todo a las que desde siempre nos hicieron sentir la pasión por nuestra cocina.



La abuela tenía imanes de colores en su nevera. Los regalaban con la leche y eran de colores.



Todo en su cocina era peculiar, desde las cacerolas de porcelana a la bolsa del pan. Pese a que hacía años que no lo necesitaba, seguía guardando en un cajón un colador para el café.



No había forma de que se deshiciese de ninguno de sus cacharros, ni de la lata del Cola Cao que utilizaba para guardar el Avecrem, ni la Melita que sustituyó al pucherete, y en el que recalentaba una y otra vez el café que a lo último que olía era a “recién hecho”. A ella le gustaba aprovecharlo todo.



Su cocina era su mundo, su espacio más deseado. Le gustaba sentarse en su silla de formica verde a escuchar la radio, a la que subía el volumen cuando tenía que irse a otra habitación de la casa. Si era música lo que sonaba y conocía la canción, ella la tarareaba.



Nos encantaba ir a verla. De pequeños nos abrazábamos a sus piernas al llegar y entonces ella se agachaba y nos daba un sonoro beso. Luego nos cogía las manos con las suyas y nos las besaba. Cuando las soltaba, nuestras manos olían a jabón Lagarto.



Sin embargo, su mejor imagen, la que mejor se corresponde con lo que era ella, estaba delante de su olla, cocinando. A mí y a mis hermanos nos encantaba el arroz caldoso con patatas. Qué sencillo, pero qué delicioso.



Yo me colocaba a un lado. “Tú mira, pero sin moverte de aquí”. Y yo de allí no me movía.



Primero cortaba las patatas y las chascaba, echaba aceite, ajos cortaditos y pimentón. A continuación el arroz, que medía en vasitos pequeños, “uno por persona”, decía. Por último echaba las patatas y luego agua caliente, sal y perejil. Lo tapaba y lo dejaba en el fuego una media hora, quizá algo menos. Luego metía la punta del cucharón y lo probaba. El rito terminaba cuando movía la cabeza con gesto de aprobación.







Conforme fueron pasando los años, las visitas a la abuela, tanto mías como de mis hermanos, eran más tardías, de manera que para ella eran un acontecimiento, una gran fiesta.



Entonces, yo acostumbraba a llamarla el día antes. Ya no me preguntaba qué querría para comer, sino  si llegaría con tiempo para “cocinar con ella”, que era lo mismo que volver a repetir aquello de “tú mira, pero sin moverte de aquí”.



Mi madre siempre me insistía en que no sabía lo que me estaba perdiendo pues hacía platos exquisitos que por desgracía se terminaría perdiendo. Mi madre decía que era difícil encontrar a alguien que “tuviese su mano para la cocina”.







La última vez que he visto a la abuela fue ayer, en la Residencia. Como en las últimas visitas, no me recordó.



A la hora de comer me senté a su lado. Retiré su plato y me levante. Ella seguía callada, con la cabeza  hacia abajo, la mirada fija y sin casi pestañear.



Yo me fuí al microhondas. Abrí el tupper que llevaba y lo calenté.



Al cabo de un par de minutos me senté otra vez a su lado y con mucho cuidado le llevé la primera cucharada a su boca. Era un arroz caldoso con patatas, que me había atrevido a preparar.



Entonces ella levantó la cabeza y me miró sorprendida. Luego la movió afirmativamente. A continuación, cogió mis manos entre las suyas y las besó.









Si hay algo de música en nuestras vidas, es porque alguien escribió para nosotros una partitura.



Si hay un poco de magia en nuestro día a día, seguro que algo tiene que ver con nuestro paladar. A veces ocurren ambas cosas.